Los primeros aborÃgenes chillanos,
muy creyentes de la fe católica en su creación veneraban a la Virgen de la Nube, muy trabajadores de sangre
y raza en su primogénito pueblo, actualmente conocido como Pueblo Viejo, labraban sus tierras para sembrar sus
cultivos de tipo serraniego, en una de sus mañaneras jornadas,
un humilde campesino pudo advertir en su parcela una Imagen; se sorprendió mucho, ¿de dónde pudo llegar?, al acercarse al lugar pudo reconocer que era de la Virgen; con mucha delicadeza y respeto lo envolvió en su poncho y lo llevó al pueblo, tal acontecimiento comunicó a los demás pobladores quienes se llenaron de contento y lo ubicaron en la capilla,Â…pero esta sorpresa no termina ahÃÂ… empezaron a investigar y consultar con otras personalidades a que advocación se aparecÃa la nueva Imagen encontrada, luego de algún
tiempo tuvÃeron conocimiento que se aparecÃa ala Virgen de la Natividad de Chilla.
Pero aquà viene lo más sorprendente; que la hermosa Virgen, después de un tiempo determinado desaparece
como por arte de magia de su capilla.
Los chillanos muy tristes
y apenados por su desaparición, delegaron comisiones de búsqueda en diferentes direcciones, luego de algunos dÃas regresaron sin tener el éxito deseado; mas bien fueron unos
cuidadores de ganado vacuno, que en uno de sus recorrido por el campo de pastoreo, en el actual Chilla en medio de un cenagal sobre un árbol de Rambrán (Aliso) estaba la Imagen
perdida, ellos llenos de contento con toda delicadeza La Bajaron, La Envolvieron en sus ponchos y trasladaron de nuevo a la Capilla, pero esto se hizo cotidiano; eran pocos los
dÃas que estaba en su templo, desaparecÃa nuevamente, pero
ya con el conocimiento que tenÃan volvÃan al cenagal donde La Reencontraron y ahà estaba Ella, en otro árbol pero en el mismo lugar, esto fue dos, tres, cuatro, no sé cuantas, que
incluso cuentan los abuelos que basado en su psiquis religioso
veÃan dejar sus pequeñas pisadas en el polvoriento camino en la bajada de Salapas en los solariegos meses de agosto y septiembre; entonces se reunieron los moradores y dijeron:
la Virgen no quiere estar en este Cerro, pues bajaremos y formaremos la nueva población por que asà lo quiere MarÃa,
y asà lo hicieron crearon la nueva población y construyeron
la prÃmera iglesia en el lugar donde actualmente se levanta
el edificio municipal y además crearon la festividad religiosa
del 8 de Septiembre en honor a la Natividad de MarÃa. Desde ese dÃa la Imagen de Nuestra Señora de la
Natividad de Chilla, se quedó para siempre junto a nosotros, venerada actualmente en su nuevo santuario por miles y miles de creyentes.
Por todo lo expuesto; estimados amigos del Ecuador entero me permito en sugerir, visiten Chilla, visiten a la Virgencita de la Natividad y encontrarán el favor que necesitan.
Enlace a Chilla, Provincia de El Oro
Los primeros aborÃgenes chillanos,
muy creyentes de la fe católica en su creación veneraban
a la Virgen de la Nube, muy trabajadores de sangre
y raza en su primogénito pueblo,